Fuente: Reforma/ Azucena Vásquez

La decisión del Gobierno de asignar un tramo más del Tren Maya al Ejército cuando se tiene una licitación en curso da un mal mensaje a las empresas constructoras y refleja que en cualquier momento se pueden cambiar condiciones, criticaron expertos.

La licitación es para la construcción del Tramo 5 Norte que va de Cancún Aeropuerto a Playa del Carmen Norte con 46 kilómetros de longitud.

A pesar de que 10 consorcios presentaron ofertas, se espera que se oficialice la cancelación del proceso porque la obra quedará en manos de militares, como ocurrirá con los tramos 6 y 7 del Tren.

“(La decisión) es preocupante y no dejaremos de insistir que es una política que no tiene sustento técnico.

“A la industria de la construcción la están relegando de participar en procesos de competencia abierto, de proyectos públicos que se ejecutan con recursos de todos los mexicanos, no son de los gobierno en turno”, señaló Eduardo Ramírez Leal, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).

Marco Gutiérrez, presidente de la Cámara Nacional de Empresas de Consultoría (CNEC), dijo que el mensaje que el Gobierno federal envía con esta decisión es criticable, ya que esta es la segunda vez que, por decisión del Presidente, quita una obra a una empresa con procesos en marcha.

“Diría que es un mal mensaje para las empresas que de buena fe acuden a una licitación, invierten su tiempo, por una decisión (de darle obras al Ejército) sin sustento técnico. El motivo es legítimo, pero no la forma”, aseveró.

Aunque legalmente una licitación puede ser declarada desierta, en este caso se hará sin un análisis técnico, explicó.

Asimismo, resaltó que en un proceso así, las empresas deben invertir en desarrollar sus ofertas técnicas y económicas, lo cual tiene costo financiero.

Originalmente, el tramo 5 del Tren Maya iba a ser construido bajo una Asociación Público Privada (APP) por el consorcio liderado por BlackRock, pero a días de adjudicarlo, el Gobierno también decidió no seguir con el plan, por considerar que, con esta opción, el costo sería más elevado de lo que tenía previsto.

Por eso este tramo fue subdivido en tramo 5 Sur, que ya fue adjudicado a un consorcio privado, y el tamo 5 Norte, que ahora quedará en manos del Ejército.

La semana pasada estaba previsto el fallo y un día antes el Fondo Nacional del Fomento al Turismo (Fonatur) informó que sería diferida para este viernes, aunque en realidad está por formalizarse la cancelación de este proceso, confirmó una fuente involucrada en el proceso.

“Estamos en espera de la determinación jurídica que se dará esta semana. Sí es la alternativa más viable (que lo construya el Ejército), pero debe formalizarse”, comentó.