Fuente: La Razón/ Fernando Franco

  • La relocalización de las cadenas productivas globales, el llamado nearshoring, impulsará el dinamismo que existe en la demanda de espacios de uso industrial y de vivienda, así como en los proyectos relacionados con inversiones verdes e infraestructura sostenible

El sector inmobiliario industrial será uno de los más beneficiados de la relocalización de cadenas globales en México, el llamado nearshoring, consideran analistas. “Las encuestas disponibles sugieren que, a nivel de empresa, se percibe cierto efecto positivo por el nearshoring.

No sólo en términos de producción, también en la evolución reciente y futura del sector inmobiliario industrial, que anticipa cierto impulso manufacturero”, comentó Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA México.

Este fenómeno ya se refleja en una mayor demanda de espacios de uso industrial y en la menor disponibilidad que existe de ellos, con entre 4 y 5 por ciento del inventario total.

Tan sólo en el 2022 se construyeron 5.6 millones de metros cuadrados (60.6 millones de pies cuadrados) de área bruta rentable (ABR), 70 por ciento más que el año anterior, según cifras de la empresa de inteligencia inmobiliaria Datoz. Se trata del incremento más alto desde que tiene registro.