Fuente: infobae/ Redacción

  • Ambos sectores habían caído en febrero, pero pudieron repuntar y compensar los malos resultados del mes anterior.

Tras los malos resultados de febrero, la industria manufacturera y la construcción lograron reponerse en marzo, aunque sólo la primera cerró el primer trimestre con valores acumulados positivos.

Según un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) en el tercer mes del año el índice de producción industrial manufacturero (IPI) registró un crecimiento del 3,1% en relación a marzo de 2022 y mejoró un 3,4% en la variación mensual desestacionalizada respecto a febrero.

De esta forma, la industria en su conjunto cerró el primer trimestre del año con una recuperación del 2,6%. con la mayoría de las actividades creciendo.

Los rubros que traccionaron

Si bien los resultados generales del nivel de producción industrial fueron positivos, hubo sectores que no lograron seguir la tendencia general y cerraron el tercer mes del año con números negativos.

El rubro de peor desempeño en marzo fue el de “madera, papel, edición e impresión”, cuyo nivel de actividad se contrajo 4,2% en comparación a igual mes del 20022. También se contrajo el sector de “alimentos, bebidas y tabaco”, que sufrió una retracción del 0,8% en la comparación interanual.

Cabe destacar, que dentro de la industria alimenticia los peores resultados los tuvieron la molienda de oleaginosas y el vino, ambos con bajas mayores al 20%. Otros rubros, como el de carne vacuna y la elaboración de productos lácteos, tuvieron valores positivos.

Ahora bien, volviendo a los números generales, se pueden encontrar varios rubros con crecimientos muy marcados durante marzo. Al que mejor le fue en el tercer mes del año es al sector de “otros equipos, aparatos e instrumentos”, que logró un crecimiento del 17,2% en comparación a igual mes de 2022. Dentro de ese ítem aparecen por ejemplo la fabricación de computadoras y celulares.

Se destacó también la industria automotriz, que alcanzó un repunte del 16,7%. También mejoraron sus resultados la fabricación de muebles (7,8%), la industria metalmecánica (7,3%) y la elaboración de “productos de metal, maquinaria y equipo” (7%), entre otros.

La construcción en alza

El indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC) también tuvo un buen tercer mes del año. De acuerdo a las estadísticas oficiales, en marzo registró una suba de 1,2% respecto a igual mes de 2022 y logró una mejora del 3,5% en comparación a febrero de este año. No obstante, el acumulado del primer trimestre de 2023 del índice presenta una baja de 0,8% respecto a igual período de 2022.

Para llegar a esos resultados, el Indec midió el nivel de demanda de los principales materiales que se utilizan para cualquier obra de construcción. El estudio muestra un fuerte repunte del uso de mosaicos, graníticos y calcáreos (21,6% de mejora interanual) y del hormigón elaborado (19,8%). También creció la demanda de cemento portland (6,4%), un material con alta incidencia en los números generales.

En el otro extremo quedó la demanda de artículos sanitarios de cerámica, cayó 25,8% entre marzo de 2022 e igual mes de este año. Tampoco fue bueno el tercer mes del año para los pisos y revestimientos cerámicos (-15,3%), los ladrillos huecos (-12,8%) y el asfalto (-9,7%), entre otros materiales.

En tanto, el Indec midió una recuperación del 16,4% en la cantidad de puestos de trabajo registrados (llegaron a 467.201), aunque se trata de datos correspondientes al mes de febrero. También para el segundo mes del año se relevó una superficie autorizada por los permisos de edificación de 912.198 m2, lo que significó una caída del 27,2% en comparación a febrero de 2022.

Malas perspectivas

Aunque los números del tercer mes del año fueron en líneas generales positivos, los especialistas anticipan que el 2023 podría ser bastante complicado para la industria y la construcción.

“La sequía tendrá efectos directos e indirectos sobre la actividad, y esperamos una contracción de 3% del PBI real. La falta de flujos de dólares limitará las probabilidades de reducir las disposiciones sobre importaciones, por lo que la industria y la inversión continuarían afectadas por la vía de los insumos”, opinó Juan Manuel Franco, economista Jefe de Grupo SBS.

“Además, en el marco de una renegociación del programa con el FMI, difícilmente haya espacio para estímulo fiscal-monetario. Finalmente, la incertidumbre ante el evento electoral acotará cualquier impulso vía inversión privada hasta tener más certezas”, agregó.