Fuente: La Razón/ Karla Mora

  • Son tres en la CDMX y dos en el Edomex; una de ellas va a conectar ambas entidades y se tiene considerado que abra en octubre; la L3 del Cablebús irá de Ajusco a Universidad

La Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) ya cuenta con 24.7 kilómetros de teleféricos en alcaldías y municipios y, en lo que queda de las actuales administraciones de la Ciudad de México y del Estado de México, se estima que haya cinco líneas de este sistema de transporte público: tres en la capital del país y dos en el Edomex, una de las cuales conectará a ambas entidades.

No obstante, en el tintero hay otras dos líneas que ya se tenían previstas en los planes de movilidad de sus respectivas entidades pero que, hasta la fecha, no se tiene certeza si se realizarán o no.

El 8 de agosto se inauguró la ruta de teleférico más reciente, la Línea 2 del sistema Cablebús en la CDMX, que va de Constitución de 1917 a Santa Marta —alcaldía Iztapalapa—, la cual tiene un recorrido de 10.6 kilómetros.

Ésta se suma a la primera línea de este sistema de transporte que está en operación desde el 11 de julio y cuyo recorrido va de Cuautepec a Indios Verdes —en Gustavo A. Madero—, con un trayecto de 9.2 kilómetros.

En el Estado de México opera desde octubre del 2016 su primera línea del Mexicable, de Santa Clara a La Cañada —Ecatepec—, en un tramo de 4.9 kilómetros.

Se prevé que, en octubre de este año, el Gobierno mexiquense inaugure la Línea 2 del Mexicable, que contará con 8.25 kilómetros y unirá Ecatepec con Indios Verdes. Así, este año habrá un total de 32.95 kilómetros de teleféricos en la ZMVM.

Para la CDMX, este año comenzará el proyecto ejecutivo para la Línea 3 del Cablebús, que irá de Ajusco a Universidad, en beneficio de los habitantes de las alcaldías Coyoacán y Tlalpan. Se prevé que la construcción de este sistema arranque en el 2022.

A pesar del avance de los proyectos, hay otras dos líneas de las que no se tiene certeza si se realizarán en las actuales administraciones. En la capital del país, el proyecto de Cablebús implicaba cuatro líneas. La última se ubicaría en el poniente, entre Álvaro Obregón y Magdalena Contreras, con vistas a la operación del Tren Interurbano México-Toluca; sin embargo, en febrero de este año la mandataria capitalina, Claudia Sheinbaum, comentó que dicho recorrido aún estaba en análisis y, lo que sí era seguro, es que su Gobierno dejaría tres líneas y un plan maestro de teleféricos para próximas administraciones.

Mientras tanto, en el Estado de México está pendiente por realizarse una línea de Mexicable que conectaría las colonias populares de la parte alta del sureste del municipio de Naucalpan con el Mexipuerto Cuatro Caminos, en un recorrido de 8.3 kilómetros, sobre la avenida Morelos.

Este proyecto fue planteado desde el Gobierno de Eruviel Ávila y hasta la fecha no se ha vuelto realidad.

Ante el crecimiento de la red de teleféricos en la ZMVM, Víctor Alvarado, responsable de la agenda de movilidad para la organización Poder del Consumidor, señaló que este tipo de sistemas tiene una función de aproximación y también, de alguna manera, significan una mejor calidad de un servicio para los usuarios que viven en las periferias del Valle de México.

Sin embargo, uno de los pendientes para lograr la integración de la movilidad es considerar la coordinación y ordenamiento del servicio “puerta a puerta”; es decir, el que se usa literalmente para llegar a sus hogares y que involucra medios como mototaxis, ciclotaxis o incluso tramos a pie.

En ese sentido, consideró que los gobiernos deben garantizar el servicio de sistemas alimentadores de los teleféricos, lo cual corresponde, en el caso de la CDMX, al Órgano Regulador de Transporte.

“Ése es un pendiente que tiene que sacar. Aquí una exigencia es que el Órgano Regulador de Transporte acelere la reestructuración de rutas zonales, para que podamos hablar de la efectividad de los sistemas de transporte de mediana y alta capacidad, donde entra el Cablebús”, sostuvo, en entrevista con La Razón.

Roberto Remes, experto en espacio público, consideró que las primeras dos líneas del Cablebús desperdician recorrido en plano; es decir, debió pensarse primero en extender líneas del Metrobús o el Metro y, sobre esos proyectos, armar redes de teleféricos hacia las montañas.

Sostuvo que aún está sobre la mesa el Plan General de Desarrollo y el Programa General de Ordenamiento Territorial, documentos que, opinó, no tienen una proyección a largo plazo, respecto a qué se puede hacer en cuestión de movilidad.