Fuente: Centro Urbano/ Fernanda Hernández

  • El BIM señaló que, pese a la pandemia, en 2020 se logró la colocación de 880 millones de pesos en firmas de crédito empresarial en la región noreste del país.

Para este 2021, el Banco Inmobiliario Mexicano (BIM) proyecta la firma de créditos por 1,028 millones de pesos (mdp) en la región noreste del país, conformada por Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas y Durango; la cual es una de las zonas que presenta mayor actividad en temas de construcción y vivienda.

Lo anterior representa un incremento del 17% con respecto a 2020; y, con ello, se espera financiar proyectos para la construcción de 1,300 viviendas en la región. De esta manera, el BIM espera crecer en 825 millones en la región; lo que corresponde a un incremento del 13 por ciento.

“La importancia de la región se debe en gran medida a que Nuevo León genera el 8% del PIB nacional y en las actividades secundarias; ya que es donde se encuentran las relacionadas a la construcción y es el primer lugar a nivel nacional con un 9.8%. Esto influye en la decisión de invertir por parte de los constructores; quienes reaccionan ante una mayor necesidad de bienes inmuebles por el crecimiento económico”, señaló Rodrigo Padilla, director general del BIM.

De acuerdo con datos del Registro Único de Vivienda (RUV), en esta zona del país, la vivienda de entre 45 y 60 metros cuadrados (m²) representa el tamaño con mayor participación en Nuevo León, con el 57.2%. Asimismo, este tamaño de vivienda representa el 44.5% del total en Coahuila, 59.1% en Tamaulipas y 69.2% en Durango.

Por otra parte, la vivienda en el rango de los 312,000 y 925,000 pesos cuenta con la mayor participación en toda la región. En Nuevo León, la vivienda popular y tradicional participan con el 91.4%; 81.6% en Coahuila, 96.9% en Tamaulipas y 94.6% en Durango.

El BIM señaló que, pese a la pandemia, en 2020 se logró llegar a 695 mdp en captación y una colocación de 880 mdp en firmas de crédito empresarial; así como un incremento de 4% y 21% en los ingresos por comisiones de crédito y avalúos, respectivamente.

Además, la captación en la región incrementó 28% con respecto a 2019, pasando de 543 a 695 millones de pesos.