Fuente: Milenio Diario/ Yeshua Ordaz

  • Según funcionarios consultados por MILENIO, se trata del pozo terrestre Dzimpona, que se prevé tenga un potencial de 600 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

Como parte de la celebración del 83 aniversario de la Expropiación Petrolera, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciará hoy el descubrimiento de uno de los yacimientos petroleros más grandes de la historia reciente, que se localiza en Tabasco, a poco más de 30 kilómetros de la ciudad de Villahermosa.

El anuncio se hace en un momento en el que la cuarta transformación intenta apuntalar la estancada producción de hidrocarburos.

“Viene el 18 de marzo y vamos a conmemorar la Expropiación Petrolera y vamos a dar un informe de todo el manejo de la política petrolera, y vamos a dar a conocer los descubrimientos, nuevos yacimientos, porque en ese sentido ha habido mucho avance y hemos tenido suerte”, dijo el Presidente en su conferencia matutina del 3 de marzo.

Según funcionarios consultados por MILENIO, se trata del pozo terrestre Dzimpona, que se prevé tenga un potencial de 600 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

De confirmarse esta cifra, se tratará del mayor descubrimiento de Pemex en tierra, superando al de Ixachi, que fue anunciado en 2017, con un volumen inicial de recursos prospectivos de 360 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

También superará el hallazgo del campo Quesqui, anunciado en diciembre de 2019, que tiene reservas probadas, probables y posibles de 500 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

Durante la 66 sesión extraordinaria del Órgano de Gobierno de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) de 2019 se autorizó la solicitud de Pemex Exploración y Producción para realizar la perforación del pozo Dzimpona, localizado en la asignación Comalcalco, cerca del puerto de Dos Bocas.

De acuerdo con el regulador, el pozo está proyectado con trayectoria direccional tipo J, teniendo como objetivo descubrir una acumulación comercial de hidrocarburos. Ramsés Pech, analista del sector energético, explicó que uno de los mayores problemas que atraviesa la empresa productiva del Estado es que no ha podido elevar la producción de crudo; sin embargo, asegura que el anuncio que realizará el Presidente “no ayudará en eso”.

El socio de Caraiva y Asociados-León & Pech Architects explicó que Dzimpona está en una fase exploratoria y toma algunos años llegar a una fase de desarrollo, por lo que el campo puede comenzar a tener producción al término de la administración o inicios de la siguiente. Un ejemplo de esto fue el campo de Ixachi, anunciado en la administración de Enrique Peña Nieto y que en su momento fue calificado como el descubrimiento más importante realizado por la petrolera en campos terrestres en los últimos 15 años, pero del cual se puede tener la primera producción en 2022.

En un informe publicado ayer por la Agencia Internacional de Energía (IEA) se muestra que en México las esperanzas de una recuperación sostenida se han desvanecido tras los fuertes recortes de gasto de Pemex y operadores independientes, así como de las demoras en el desarrollo de nuevos proyectos, por lo que pronostican que la producción caiga a 1.7 millones de barriles para 2026.

“Pemex había destinado miles de millones para estos desarrollos, pero la pandemia la llevó a recortar su presupuesto de inversión planificado para 2020 en 40 mil 500 millones de pesos.

El gasto aún fue ligeramente más alto que en 2019. Los campos prioritarios anunciados a fines de 2019 son clave para la estrategia de Pemex que busca revertir las pérdidas y elevar la producción durante los próximos cuatro años”, señaló la agencia.

Aunque la producción aumentó de manera constante a alrededor de 150 mil barriles diarios para fines de 2020, la inversión y la perforación se retrasaron significativamente en los planes originales. La IEA señala que, a pesar de los esfuerzos por estabilizar las caídas, la producción siguió cayendo y Ku-Maloob-Zaap bajó de 800 mil barriles a casi 690 mil barriles en 2020 por lo que se espera que las caídas se aceleren a mediano plazo.

“La reforma energética de 2013 que abrió el sector petrolero a la inversión extranjera y permitió a los operadores internacionales ofertar por bloques de exploración costa afuera, aún no ha dado sus frutos”, aseguró.