Fuente: El Economista/ Nallely Hernández

  • Calidad Cloud busca ofrecer servicios digitales para mejorar el desarrollo de las obras y así reducir pérdidas por mala gestión

La construcción se ubica como el penúltimo sector en el empleo de herramientas digitales, sólo por delante de la agricultura, lo cual, de acuerdo con miembros de la industria, abre espacio al desarrollo de innovaciones por medio de la tecnología para mejorar los procesos.

Tal es el caso de Calidad Cloud, un software que permite llevar un control digital de las obras desde el inicio, por ejemplo, desde el proceso de excavación hasta el arranque de las ventas, explicó Robinson Fuentes, director general de la plataforma.

Sin embargo, uno de los principales retos es tratar de incorporar procesos digitales a una industria que ha cambiado poco en el uso de herramientas de gestión.

“La industria de la construcción, de acuerdo con Mckenzie (empresa de gestión digital) indica que la construcción es la penúltima, solo rebasa a la agricultura, en la incorporación de tecnología para digitalización”, apuntó Fuentes.

Así, al rentar el uso de la plataforma, le permite al usuario almacenar información correspondiente al proyecto, que va desde planos o permisos, lo cual incide directamente en el ahorro de tiempo, al mejorar el control de calidad.

“Cerca de 80% de las pérdidas de un edificio o de un proyecto en construcción, en la plata y los plazos, casi 80% se relaciona a trabajos rehechos, trabajos que se tuvieron que hacer y demoler, porque no fueron hechos con el estándar de calidad”, detalló el empresario.

¿Por qué digitalizar las obras?
Para el directivo, la gran ventaja de contar con un repositorio digital de cómo se desarrolló el proceso de construcción de una obra, impacta en primer lugar directamente en la eficiencia del desarrollo, y por consecuencia en reducir las pérdidas por mala gestión.

“Nos enfocamos en el control de calidad de la ejecución de la actividad, según el proyecto, no nos enfocamos en cuantificar materiales, tampoco dinero o presupuestos, sino en que la obra se ejecute cómo estaba pensada, desde la ingeniería y la arquitectura”, explicó el directivo.

“Y las empresas al construir mejor no pierdan plata ni tiempo al construir su proyecto”.

Sin embargo, otra ventaja que permite la digitalización es el tener acceso inmediato al historial de una obra, una ventaja útil sobre todo en zonas sísmicas como es el caso de México y Chile.

“En Chile, en el año 2010 nos movimos en un terremoto gigante, de 8.8 (grados en la escala Richter), pero la ciudad se comportó bastante bien, no se perdieron suministros de agua y eléctricos.

“Se logró, porque en Chile hace unos 20 años empezó el concepto de la trazabilidad, que significa saber a ciencia cierta quién es el que termina la actividad uno, para que continúe la dos, eso implica que se sabe qué se hizo con un documento firmado”, explicó el especialista.

Así, contar con un proceso de digitalización puede facilitar el proceso de revisión y acumulación de información para cualquier emergencia que lo requiera.